Los turistas extranjeros y nacionales que vacacionan por estos días en Cuba se beneficiaron de un sistema de protección eficiente ante el huracán Irma, reseñan hoy despachos de prensa.
Cuando aún este lunes las autoridades contabilizan los daños ocasionados por el meteoro, la mayoría de los reportes señalan que un aceitado sistema de garantía de vidas abarcó también a las personas que descansaban en polos de recreo de esta nación.
Precisamente, Irma azotó todo el litoral norte cubano con impacto particular en el centro de la isla, donde se encuentran escenarios como Cayo Coco (Jardines del Rey).
Algunos informes preliminares dieron cuenta de que alrededor de 51 mil turistas recibieron protección y de ellos 36 mil fueron trasladados a lugares seguros.
En una reunión de información del Consejo de Defensa de la Región Estratégica del Ejército Oriental, presidida por el General de Cuerpo de Ejército Ramón Espinosa Martín, abordaron estos asuntos.
Dicha reunión tuvo la presencia del ministro de turismo de Cuba, Manuel Marrero, quien ilustró detalles de la situación en su esfera.
Sentenció en ese momento que el 60 % de los visitantes extranjeros alojados en la isla provenían de Norteamérica, en su mayoría ubicados en la cayería norte, quienes iniciaron el regreso de inmediato, antes del paso del huracán.
Los viajeros de otras procedencias se trasladaron oportunamente hacia hoteles más seguros dentro de los polos, con menor riesgo o en ciudades como Camagüey, a donde fueron además todos los de la playa de Santa Lucía.
Otros destinos de recepción en instalaciones más protegidas resultaron Varadero, La Habana, Trinidad y Cienfuegos.
Precisó Marrero que también se chequearon las condiciones de seguridad de las casas de arrendamiento privadas, y el caso de los turistas foráneos alojados en viviendas sin condiciones apropiadas para resistir el impacto del huracán o zonas de posibles inundaciones.
El periódico Escambray, del centro de este país, publicó tales detalles y certificó el engranado sistema de seguridad para los turistas en esas zonas.
Otros despachos, tanto de periodistas extranjeros como de la Agencia Cubana de Noticias (ACN) refirieron esa evacuación de 36 mil turistas de las zonas amenazadas por el fenómeno atmosférico.
Reseñaron que los 17 hoteles en el polo turístico de Jardines del Rey (cayos Coco y Guillermo, centro-norte) fueron impactados con olas de entre tres a cinco metros de altura.
Pero las medidas de cuidado de los turistas, como las referentes al resto de la población, abarcaron todos los lugares que podrían tener afectaciones por el huracán, recordaron autoridades.
Por su parte, la viceministra cubana de Turismo, Mayra Álvarez, opinó que los mayores perjuicios están en los lobbies y los techos de los hoteles, pero las habitaciones recibieron impactos menores, por lo que la recuperación puede ser en breve tiempo.
El ministro de Turismo comentó que es necesario priorizar los arreglos en ese aeropuerto para realizar las conexiones cuando se restablezcan las condiciones, sobre todo en Cayo Guillermo, quizás menos afectado (según inspección ocular en helicóptero).
Gracias a la acción de esas autoridades no hubo que lamentar pérdidas humanas entre los vacacionistas, y mostraron optimismo en cuanto a la recuperación.
