Julio, un funcionario del Ayuntamiento de la localidad española de Alcalá de Henares (Comunidad de Madrid) estaba celebrando su jubilación junto a sus colegas.
En un momento de la fiesta le sientan en una silla y aparece una stripper, que baila y hace provocativas acrobacias mientras se desnuda. Julio se deja quitar la camisa y la escena va subiendo de tono entre compañeros de trabajo que jalean a la bailarina y hacen comentarios de dudoso gusto mientras lo graban todo con el móvil.
La escena podría ser reprobable desde varios puntos de vista, pero lo que la ha convertido en un verdadero escándalo es que la fiesta tuvo lugar en un edificio público, en las dependencias del Ayuntamiento de Alcalá de Henares, concretamente en el Parque de Servicios Municipal, donde se guardan los vehículos oficiales.
Según el diario local 'Alcalá Hoy', la fiesta tuvo lugar el pasado tres de Marzo.
El mismo medio publica un comunicado del Ayuntamiento, en el que puede leerse que "es habitual permitir celebraciones de jubilación por parte de los compañeros de trabajo.
En este caso, la despedida derivó en un espectáculo lamentable ante el cual se han tomado las medidas oportunas".
En concreto, se refieren a que "la semana pasada mediante un decreto del propio alcalde, se ordenó la investigación y se designó a una funcionaria de nivel directivo con capacidad para investigar todo lo relacionado con este hecho".
El Ayuntamiento, en el mismo comunicado, expresó que "considera lamentables e inadmisibles estos hechos.
Por ello, ha actuado con firmeza y contundencia para dirimir cuantas responsabilidades pudieran darse".
rt