El Gobierno chino confió hoy, tras normalizar las relaciones diplomática con Noruega 6 años después de que se interrumpieran por la concesión del Nobel de la Paz 2010 al disidente chino Liu Xiabo, que ese galardón no se concederá más a "criminales".
"Esperamos que este premio contribuya a promover la paz y el desarrollo mundiales" en el futuro, afirmó una portavoz del Ministerio de Exteriores, Hua Chunying.
Hua recordó, en rueda de prensa, que en el pasado y debido a "agendas políticas", se ha concedido el galardón a "criminales dedicados a dividir a China, a debilitar la unidad nacional y a promover la subversión contra el Estado".
Por ello, Pekín ve la concesión del Nobel de la Paz a Liu como algo que va "contra la voluntad de (Alfred) Nobel y como una interferencia grosera en los asuntos internos de China", añadió.
Liu fue condenado en 2009 a 11 años de cárcel por subversión, tras publicar en 2008 la llamada 'Carta 08' junto a otros 302 intelectuales chinos, un documento que pedía reformas legales, democracia y protección de las libertades fundamentales en China.
Esa concesión provocó la congelación de las relaciones bilaterales por parte de Pekín, algo que se mantuvo hasta que ayer China y Noruega anunciaron la restauración de los lazos.
"El Nobel de la Paz de 2010 y otros asuntos relacionados fueron la razón de que las relaciones se congelaran", recalcó hoy Hua, quien no ofreció detalles acerca de si se espera que el primer ministro noruego realice una visita a Pekín en primavera o se reanuden las conversaciones sobre un acuerdo de libre comercio.
Ese acuerdo estaba a punto de firmarse cuando el Comité Nobel de Oslo anunció el premio para Liu Xiabo, quien sigue encarcelado y a quien la prensa estatal y las autoridades chinas siempre describen como a un "criminal" y sin reconocerle el galardón de 2010.