Las élites locales adularán a los grupos de inmigrantes para conseguir votos.
Las élites se aislarán en su mayoría de las crisis culturales en sus comunidades insulares, escuelas privadas, y clubes sociales, donde puedan continuar incubando su propia subcultura sin influencia externa.
Al mismo tiempo, harán discursos y promulgarán políticas para obligar a los ciudadanos nativos a aceptar el multiculturalismo y la inmigración ciega.
Las leyes contra las fobias y la lucha contra la discriminación se aplicarán con más fuerza que otros delitos más graves.
La policía vigilará las redes sociales para identificar a aquellos que hagan declaraciones en contra de las clases protegidas.
El declive cultural empieza de verdad cuando los nativos sienten vergüenza o culpa por lo que son, por su historia, su forma de vida, y de aquello de lo que provenían sus antepasados.
Dejarán a grupos de inmigrantes criticar sus costumbres sin protestar, o simplemente abrazarán las costumbres de los inmigrantes en su lugar, mediante conversión religiosa y matrimonios interétnicos.
El orgullo nacionalista, será condenado como un fenómeno de "extrema derecha" y los políticos nacionalistas populares serán comparados con Hitler.
Los nativos aprenden el arte de la autocensura, lo que limita el rango de su discurso y expresiones, y pronto sólo los ancianos pueden decir las verdades de la decadencia cultural, mientras que un multiculturalista más joven al alcance del oído atribuye tanta franqueza a la senilidad o la nostalgia racista.
Los planes de estudios de las escuelas podrán cambiarse para promover la diversidad o el multiculturalismo, a un gran costo para la cultura nativa.
Se harán concesiones para no ofender a los inmigrantes.
Encontrarán una continua fuente de ultrajes y esto alimentará el poder de las organizaciones, creando un Estado dentro del Estado en el que las élites nativas se vuelven temerosas de aplicar las leyes a los inmigrantes.
Mientras que muchos inmigrantes adultos se sentirán satisfechos con la oportunidad de vivir en un país más próspero, otros pronto se sentirán resentidos al verse forzados a trabajar en empleos de baja categoría en un país mucho más caro que los suyos.
La mayoría de ellos permanecen en las clases económicas más bajas, viviendo en "comunidades inmigrantes" pobres en las que pueden hablar su propio idioma, encontrar alimentos de sus patrias, y seguir sus propias costumbres o religión.
En lugar de salir de sus comunidades de extranjeros, los inmigrantes intentan expandirlas mediante la organización.
Forman grupos locales y organizaciones civiles para enseñar a los nativos mejores maneras de comprender y servir a la población inmigrante.
Estarán ansiosos por dar a conocer los casos en que los inmigrantes han sido insultados por nativos insensibles o tratados injustamente por las autoridades policiales en el caso de delitos menores.
Con el ambiente de lo políticamente correcto ya arraigado, la cultura local se convierte en una especie de cultura "mundial" que puede declararse tolerante y progresista, siempre y cuando haya una ausencia de crítica contra los inmigrantes, el multiculturalismo, y su influencia combinada.
Las tradiciones nativas serán erradicadas y se llevará a cabo una mezcla cultural donde los ciudadanos de una nación del mundo serán casi idénticos en comportamiento, pensamiento, y gustos en patrones de consumo a los ciudadanos de cualquier otra nación.
Una vez que se produce un colapso, no se puede revertir.
El patrimonio cultural de la nación se perderá para siempre.
http://latrincheradeoder.blogspot.com/2016/09/la-esterilizacion-de-la-cultura-nativa.html