Charles Spencer Chaplin, o simplemente Charlie Chaplin, o mejor dicho Charlot, es uno de los más grandes cineastas de todos los tiempos.
Nació en 1889 en un barrio pobre de Londres, este ambiente de miseria, de lucha por el pan, de vagabundos y policías, una pequeña jungla, donde se crió el niño Chaplin y donde quizás veía muchos trucos, persecuciones, abusos y cosas de la vida mundana, que llevó al lenguaje del cine mudo como un pequeño vagabundo frágil, tierno y con una simpatía natural.
Educado por su madre, una excelente actriz con una salud precaria, tuvo desde muy joven que ganarse la vida en teatros y carpas populares donde era obligatorio hacer reír y complacer a un público que no buscaba arte sino diversión.
Pero nuestro personaje tenía dentro de sí un gran artista que había de emerger no solo en medio de estas dificultades sino de otras que lo persiguieron durante toda la vida.
A los 20 años ya estaba en una célebre compañía que cultivaba la pantomima.
Allí, con un público difícil, aprendió a perfeccionar sus movimientos y a provocar la risa en cualquier situación. Su papel del borracho que camina tambaleándose, trascendió todas sus presentaciones en el teatro.
Algunas giras lo llevaron a París y a los Estados Unidos, como miembro de una compañía de teatro. Por esa época él soñaba con ser un joven galán, no sabía que su físico y sus habilidades lo llevarían, por otro camino, muy lejos.
Comenzó en el teatro con el vestuario de ocasión de la obra, pero el mismo fue construyendo un personaje. En primer lugar, Chaplin era de pequeña estatura, por lo que se hizo de un bastón, también de unos zapatos de talla desmedida y un chaleco de fantasía.
Esta vestimenta se iría ajustando con el tiempo para lograr la definitiva imagen que está consagrada en millones de posters en todo el mundo.
Con la Compañía Keystone rodó 35 filmes de una bobina, obras muy primarias que le permitieron afilar su personaje y su humor. Su personaje clásico tomó forma definitiva.
Cuando consideró su oficio totalmente maduro, se hizo además de actor, director, y productor. Chaplin filmaba muchas escenas para lograr la perfección. Filmaba 40 o 50 veces una escena, lo cual lo hizo mundialmente famoso como un perfeccionista.
Esto tendría también otras razones, el cine mudo había descubierto el montaje, y la escena se fragmentaba en diferentes ángulos y después se montaba. Chaplin nunca filmó así, él necesitaba que en cada plano se viera su cuerpo entero porque el actuaba con todo su cuerpo desde la cabeza hasta los pies.
El personaje de Charlot Chaplin está fijado en la pequeña estatura, tierno, caritativo, y un vagabundo muy digno. Su vagabundo jamás abandonó la dignidad.
Chaplin se burlaba de los personajes poderosos, millonarios, policías y de cualquier otro símbolo del poder. Un ejemplo típico: en un balcón ingiere un helado, en la planta baja está una señora vieja muy encopetada, a su lado una muchacha pobre, bonita por cierto, porque Chaplin nunca desdeñó la belleza femenina.
Al personaje que interpreta Chaplin se le cae una bola de helado que cae encima de la señora, provocando la risa. Chaplin explicaba que si el helado hubiese caído encima de la muchacha no provocaría risa.
Decía Chaplin que una de las primeras cosas que aprendió en el teatro popular es que el público prefiere que el rico siempre lleve la peor de las partes.
Mientras Chaplin filmaba La Quimera de Oro, su primer largometraje donde Charlot emprende la búsqueda del oro en medio de múltiples situaciones cómicas y tragicómicas, otras cosas estaban sucediendo en Hollywood.
Intolerancia, un filme de Griffith, el mismo director de nacimiento de una nación, terminó en un enorme desastre financiero, se terminó el reino de los creadores con su abuso de imaginación y gastos millonarios, y se creó el monstruo de los productores típicos de Hollywood.
Otro factor que cambió el curso de la historia del cine fue que el 23 de octubre de 1922 se estrenó el primer filme hablado y cantado, comenzaba el reino del cine sonoro y terminaba la era de las experiencias artísticas.
Para asombro de muchos debo decir que Chaplin junto a Eisenstein y otros grandes directores y artistas, publicaron un manifiesto contra el cine mudo, planteaban que con esta nueva técnica se acababa la posibilidad del arte cinematográfico.
Y así fue. Durante décadas el cine sonoro no logró producir obras importantes.
El desarrollo continuó, y Chaplin se aprestó a hacer en ese nuevo lenguaje algunas obras maestras. Recordemos que Chaplin era músico y fue el autor de las partituras de sus películas.
Usted puede discutir si son mejores las películas mudas o las sonoras de este genio del cine, pero esto no fue lo que lo alejó del arte.
Acosado por los críticos serviles y una inmensa campaña anticomunista que hacia ver a un humanista como Chaplin, un temible enemigo, fueron hechos que cambiaron el giro de la vida de Chaplin y de la historia del cine.