Si Francia no realiza finalmente la entrega de portahelicópteros clase Mistral a Rusia, recibirá el aplauso de Polonia y EE.UU., pero comprometerá seriamente la venta de las naves, opina la agencia France Press.
Una fuente cercana a la empresa de construcción naval DCNS, Si Francia rescinde el contrato, no tiene 'plan B', según una fuente cercana a la empresa de construcción naval DCNS.
En otras palabras, Francia tendrá difícil encontrar un nuevo cliente para la venta de los Mistral previstos para, ya que están equipados de acuerdo con las exigencias de Moscú y técnicamente no encajarían en otro Ejército, informa la agencia.
"Rusia, por supuesto, presentará una denuncia y exigirá el pago de la multa, y tendrá todas las posibilidades de ganar este pleito", comenta el analista militar independiente Alexander Goltz.
A su juicio, Francia se verá como un país que se vio obligado a ceder a la presión EE.UU.
De acuerdo con otro experto de la Fundación para la Investigación Estratégica (FRS, por sus siglas en francés), Bruno Tertre, el margen de maniobra de Francia respecto a los Mistral es muy limitado.
Según él, si la situación sigue estancada durante unos meses más, París tendrá que rescindir el contrato.
Los congresistas estadounidenses propusieron a la OTAN comprar las naves para que no fueran suministradas a Rusia. No obstante, la OTAN no podría adquirir a Francia los portahelicópteros previstos para Rusia, ya que carece de los recursos suficientes.
Los presupuestos militar y civil de la OTAN para 2014 ascienden juntos a 1.600 millones de dólares, mientras la multa por no suministrar los Mistral podría alcanzar los 3.000 millones de dólares.