Miles de profesores, estudiantes y personas que se solidarizaron tomaron las calles para exigir justicia por los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos desde hace 33 días.
También tomaron empresas petroleras y hasta el aeródromo como medida de presión para que aparezcan los jóvenes.
Docentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación bloquearon este jueves el aeropuerto de Oaxaca como parte de las medidas de presión de la jornada nacional para exigir justicia al gobierno de Enrique Peña Nieto por este caso.
Los manifestantes dejaron las aulas y decidieron tomar el control de carreteras, autopistas, negocios, plazas comerciales, el acceso al aeropuerto de la Ciudad de Oaxaca y la refinería “Antonio Dovali Jaime” de Petróleos Mexicanos en el puerto de Salina Cruz, en la zona del Istmo de Tehuantepec para reclamar que aparezcan con vida los 43 estudiantes de la Escuela Rural de Ayotzinapa, desaparecidos desde el pasado 26 de septiembre.
El bloqueo es parte de un paro que inició a las 8 de la mañana de este miércoles y se mantendrá hasta después de las 5 de la tarde, lo que se torna indefinido.
Los usuarios que deseen ingresar caminando al aeródromo lo pueden hacer, siempre y cuando sea para abordar.
Por su parte, más de mil estudiantes y maestros de las Facultades de Ciencias Químicas y Economía de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) marcharon desde ciudad Universitaria al Zócalo de la ciudad, en demanda de la presentación con vida de los 43 jóvenes de Ayotzinapa.
Los familiares exigen al Gobierno que agilice las investigaciones en otras zonas del país, y dejar de lado el análisis de fosas clandestinas o comunes, pues aseguran que sus hijos “están vivos”.
Este miércoles, un grupo de padres se reunió con el presidente mexicano y acordaron ejecutar varias medidas, pese a que no confían en la búsqueda que realiza la Procuraduría General de la República.
Emiliano Navarrete, padre de uno de los desaparecidos, aseveró que los normalistas están con vida en entrevista exclusiva para teleSUR. No obstante, recalcaron que los acuerdos con Peña Nieto fueron insuficientes.
La Jornada