La publicación del nuevo libro de la ex secretaria de Estado Hillary Clinton esta semana aumenta las expectativas de sus todavía no declarados pero muy posibles planes de aspirar a la presidencia de EE.UU. en 2016.
En sus memorias, 'Hard Choices' ('Decisiones difíciles'), Clinton analiza una amplia gama de asuntos políticos tratados durante su desempeño como secretaria de Estado desde 2009 a 2013. Uno de estos asunto es su idea sobre qué política debe realizar EE.UU. respecto a China.
No puede ni siquiera lidiar con su marido, pero quiere gestionar un país
La revista 'Foreign Policy' analizó qué piensan los chinos sobre Clinton y su posible participación en las presidenciales.
De los medios chinos, conversaciones en la Red y entrevistas, se desprende que la idea sobre la presidencia de Hillary Clinton irrita a los intelectuales, a ciudadanos comunes y, teniendo en cuenta cómo cubren temas sobre ella los medios estatales, posiblemente a los líderes chinos también.
"Ni siquiera puede lidiar con su marido, pero quiere gestionar un país", afirmó uno de los usuarios de Sina Weibo, una popular red social, en un comentario representativo de esta forma de pensar.
La opinión negativa parece generarse en los medios estatales que llevan unos diez años describiéndola como una dura, fuerte y desagradable dama de hierro.
Varios expertos atribuyen tal actitud al hecho de que durante su cargo, Clinton fuera demasiado crítica con China y aumentara la presencia militar de EE.UU. en el sureste de Asia, así como su apoyo a los adversarios de Pekín en sus disputas territoriales.
En 2010, Clinton declaró que la libertad de navegación en el mar de China Meridional constituye un "interés nacional" de Estado Unidos.