(PL) Mohammed Abdullah Alhaty, integrante de las bandas mercenarias que luchan por derrocar al gobierno sirio, constituye hoy una nueva prueba del componente terrorista que ha adquirido aquí el actual conflicto armado.
Durante un reportaje divulgado este domingo en la televisión estatal, Alhaty confesó haber participado en numerosos atentados contra establecimientos públicos y viviendas, además de colocar explosivos en varios puntos de esta capital.
Reveló que al inicio de la crisis, en marzo de 2011, participaba en las manifestaciones pacíficas, pero luego decidió tomar las armas y formar un grupo con el cual atacaba a los personas que apoyaban al gobierno y robaba su dinero y automóviles.
Agregó que cuando el Ejército Árabe Sirio entró en el distrito de Kadam, en esta capital, desaparecieron las armas y falsificaron los carnets de identidad para evitar ser capturados por las fuerzas de seguridad.
Ejecuté varios ataques, como el asalto a la comisaría de Kadam junto a dos grupos armados que se autodenominan Suqur al-Cham y la Brigada de Tawhid, explicó.
De igual forma, el extremista detalló que en algún momento se cambió a otra banda de irregulares denominada Abubaker Al-Sadiq, en la región de Swieka, y su misión era sembrar artefactos explosivos.
Sembramos numerosas bombas en varias zonas, por ejemplo, en la Comandancia de la Policía y el Palacio de Justicia, detalló.
Agregó por último que el líder de otro grupo llamado Ahrar Swieka les distribuía pastillas estupefacientes antes de salir a cualquier misión, para evitar que entraran en pánico y desertaran.
tgj/lr
Reveló que al inicio de la crisis, en marzo de 2011, participaba en las manifestaciones pacíficas, pero luego decidió tomar las armas y formar un grupo con el cual atacaba a los personas que apoyaban al gobierno y robaba su dinero y automóviles.
Agregó que cuando el Ejército Árabe Sirio entró en el distrito de Kadam, en esta capital, desaparecieron las armas y falsificaron los carnets de identidad para evitar ser capturados por las fuerzas de seguridad.
Ejecuté varios ataques, como el asalto a la comisaría de Kadam junto a dos grupos armados que se autodenominan Suqur al-Cham y la Brigada de Tawhid, explicó.
De igual forma, el extremista detalló que en algún momento se cambió a otra banda de irregulares denominada Abubaker Al-Sadiq, en la región de Swieka, y su misión era sembrar artefactos explosivos.
Sembramos numerosas bombas en varias zonas, por ejemplo, en la Comandancia de la Policía y el Palacio de Justicia, detalló.
Agregó por último que el líder de otro grupo llamado Ahrar Swieka les distribuía pastillas estupefacientes antes de salir a cualquier misión, para evitar que entraran en pánico y desertaran.
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