El número de la población de los prisioneros federales de EE.UU. ha registrado un aumento de casi 790 % desde el año 1980, según revela el reciente informe del Servicio de Investigaciones del Congreso estadounidense.
De acuerdo con este polémico dato, recogido por el brazo investigativo del Congreso norteamericano, en los últimos 3 décadas, la población carcelaria en los centros penitenciarios federales pasó de 25 mil a 219 mil personas; lo que supone un salto increíble para el principal país defensor de la “libertad y paz”.
Estos índices que ponen de relieve la deficiencia del sistema federal de prisiones, también muestran que Estados Unidos ha encarcelado a más personas que ningún otro país del mundo, ya que hoy en día tiene 716 reclusos por cada 100 mil habitantes.
“Este es uno de los mayores problemas de derechos humanos dentro de Estados Unidos, puesto que muchos de los atrapados en el sistema de justicia penal pertenecen a sectores de bajos ingresos y a minorías étnicas y raciales, frecuentemente marginados por la sociedad”, anunció la directora interina de la organización de Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés), Maria McFarland.
Esta situación obligó a las autoridades del país a incrementar el presupuesto de la Oficina de Prisiones hasta alcanzar 6400 millones de dólares, casi el doble de la cifra inicial, establecida pese a los mayúsculos problemas del sistema carcelario.
El número de los encarcelados de origen hispano en Estados Unidos también tiene un rumbo creciente, según señala un informe en 2011, el cual da a conocer que, por primera vez en la historia, el número de latinos condenados por delitos federales supera en términos absolutos al de otros grupos étnicos sentenciados en el país, aunque los habitantes de origen hispano apenas representan el 16% de la población total del país.
HISPAN TV
De acuerdo con este polémico dato, recogido por el brazo investigativo del Congreso norteamericano, en los últimos 3 décadas, la población carcelaria en los centros penitenciarios federales pasó de 25 mil a 219 mil personas; lo que supone un salto increíble para el principal país defensor de la “libertad y paz”.
Estos índices que ponen de relieve la deficiencia del sistema federal de prisiones, también muestran que Estados Unidos ha encarcelado a más personas que ningún otro país del mundo, ya que hoy en día tiene 716 reclusos por cada 100 mil habitantes.
“Este es uno de los mayores problemas de derechos humanos dentro de Estados Unidos, puesto que muchos de los atrapados en el sistema de justicia penal pertenecen a sectores de bajos ingresos y a minorías étnicas y raciales, frecuentemente marginados por la sociedad”, anunció la directora interina de la organización de Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés), Maria McFarland.
Esta situación obligó a las autoridades del país a incrementar el presupuesto de la Oficina de Prisiones hasta alcanzar 6400 millones de dólares, casi el doble de la cifra inicial, establecida pese a los mayúsculos problemas del sistema carcelario.
El número de los encarcelados de origen hispano en Estados Unidos también tiene un rumbo creciente, según señala un informe en 2011, el cual da a conocer que, por primera vez en la historia, el número de latinos condenados por delitos federales supera en términos absolutos al de otros grupos étnicos sentenciados en el país, aunque los habitantes de origen hispano apenas representan el 16% de la población total del país.
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