Tanto las autoridades del Instituto del Patrimonio Cultural (IPC) como los voceros del pueblo pemón criticaron la posición del gobierno de Alemania, con respecto al reclamo hecho por Venezuela por la devolución de la Piedra Kueka Abuela, debido a que omiten que la roca sagrada fue extraída ilegalmente.
El presidente del IPC, Raúl Grioni, mostró las respuestas que, sobre este caso, el gobierno alemán ofreció a los diputados de este país y en las que se afirma que se “está promoviendo una retrodonación y posterior devolución de la piedra a Venezuela”, pero “en la medida en que se logre un acuerdo entre todos los interesados“.
Grioni explicó con la “retrodonación” que promueve Alemania no se cuestiona la legitimidad de la sustracción de la piedra de 30 toneladas del Parque Nacional Canaima, del estado de Bolívar, en 1998, por el artista plástico alemán Wolfang Von Schwarzenfeld.
“En el supuesto negado que la donación fuera legítima, ¿por qué tiene que intervenir el artista alemán? Si el gobierno de Alemania decide que hay que devolverla, que la devuelva y se terminó la historia”, expresó.
El arquitecto recordó que la supuesta donación fue concedida por el entonces titular del Instituto Nacional de Parques, Héctor Hernández Mujica, quien no estaba autorizado para hacerlo y apuntó que en aquella época (1998) no hubo acto conclusivo del Ministerio Público.
“La Fiscalía lo está retomando. Mañana hay una reunión para tratar las imputaciones, con consecuencias penales, a tres funcionarios venezolanos. Eso está marchando“, explicó.
Por su parte, el representante del pueblo pemón, Melchor Flores, también rechazó el uso del término “retrodonación”, al que se refiere el gobierno alemán en el documento.
“Esa piedra que se encuentra en Alemania en ningún momento fue de esa nación, el artista alemán la sacó cuando las comunidades estaban concentradas en otro sitio, él extrajo la piedra. Todos los indígenas saben que la piedra Kueka, es de la Gran Sabana, es de la comunidad indígena Santa Cruz de Mapaurí. Por muchos siglos la hemos custodiado”.
Cerca de 10 notas verbales ha realizado la Cancillería de Venezuela para solicitar el regreso de la piedra Kueka, pero ninguna ha sido contestada, además, el 21 de junio de este año un grupo de representantes de la comunidad pemón, acompañados por miembros de otros pueblos indígenas, acudieron a la sede de la embajada de Alemania en Venezuela, para pedir que devolvieran el monumento sagrado.
Además, la Asamblea Nacional publicó un acuerdo sobre la repatriación de la piedra Kueka. Allí se destaca la importancia de esta piedra en la cosmovisión del pueblo indígena pemón y como parte del Patrimonio Natural de la Humanidad.