Vojislav Šešelj. líder del Partido Radical serbio, está siendo sometido a jucio por el Tribunal burgués de La Haya que "juzga" los crímenes de la ex guerra de Yugoslavia pero no los que sus socios cometen en Oriente Medio. Recordemos que ya asesinaron a Milosevic.
Según las informaciones que nos llegan, el 5 de enero de 2012 en la cárcel del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) en La Haya, el líder del Partido Radical Serbio, profesor Vojislav Šešelj, sufrió un grave infarto.
Según las informaciones que nos llegan, el 5 de enero de 2012 en la cárcel del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) en La Haya, el líder del Partido Radical Serbio, profesor Vojislav Šešelj, sufrió un grave infarto.
Cabe recordar que en febrero de 2012 se cumplirán 9 años desde que Šešelj fuera recluido en la prisión de La Haya, sin mediar condena.
El largo periodo de encarcelamiento, así como las huelgas de hambre de varios días que ha realizado en señal de protesta contra la violación de sus derechos, están teniendo nefastas consecuencias para la salud del líder de las fuerzas patrióticas serbias.
El objetivo de estos inquisidores de La Haya es evidente.
El objetivo de estos inquisidores de La Haya es evidente.
En marzo del presente año, V. Šešelj debe tomar parte en el juicio con su alegato final.
Después de lo cual, el tribunal debe dictar sentencia.
No cabe ninguna duda de que el “caso” Šešelj ha fracasado.
La fiscalía no ha podido demostrar ni un solo punto de la acusación.
Pero la puesta en libertad de Šešelj es algo inadmisible tanto para el tribunal, como para sus amos del otro lado del océano.
Declarar inocente a este patriota serbio significa reconocer que los auténticos criminales fueron los dirigentes de los EE. UU. y de otros países de la OTAN, culpables de agredir a Yugoslavia, al igual que sus lacayos del TPIY.
Además, esta primavera tendrán lugar elecciones en Serbia, por lo que Occidente no puede permitir que el Partido Radical Serbio que encabeza Šešelj reciba la mayoría en el parlamento.
No puede tampoco Occidente permitir el acercamiento de dos aliados históricos como son Rusia y Serbia, una alianza que siempre ha defendido Šešelj.
Por eso la única salida para el tribunal y sus amos es la desaparición física del inculpado.
Durante los casi 20 años de la ilegal existencia, el TPIY ha perfeccionado los métodos de aniquilación de los prisioneros políticos serbios. En La Haya, han muerto ya 16 serbios.
El caso más indignante fue el asesinato del presidente Slobodan Milosevic, al que se le negó que recibiese en Rusia el tratamiento que requería, pese a las garantías del gobierno de la Federación de Rusia.
El PCFR exige una evaluación médica urgente e independiente por un grupo internacional de médicos, por cuanto tenemos todos los fundamentos para no confiar en los médicos holandeses, responsables de la muerte de Milosevic.
Exigimos que se permita urgentemente a un cardiólogo ruso la visita al profesor Šešelj.
Insistimos en que se le conceda a Šešelj la posibilidad de recibir tratamiento en Rusia, con las correspondientes garantías por parte de nuestro país.
Y lo más importante, esta vergonzosa farsa judicial contra un inocente, que atenta contra todas las normas del derecho internacional, debe cesar. V. Šešelj debe ser puesto en libertad.
Y el TPIY que ejerce al modo de la Gestapo como una inquisición nazi, debe ser inmediatamente disuelto.
Tomado del blog de Josafat S. Comín
Guennadi Ziugánov
Servicio de prensa del PCFR
Tomado del blog de Josafat S. Comín
Guennadi Ziugánov
Servicio de prensa del PCFR