Miles de estudiantes se manifestaron este jueves bajo una intensa lluvia
por las calles de Bogotá para protestar contra la reforma de la
educación del Gobierno de Colombia.
La protesta, que se extendió por las principales capitales
departamentales del país, fue secundada por unos dos millones de
personas en toda Colombia, según el portavoz de la Organización
Colombiana de Estudiantes (OCE), Sergio Fernández.
“Solo en Bogotá movilizamos a más de 200.000 personas”, afirmó
Fernández desde la Plaza de Bolívar, en el centro histórico de la
capital.
Las autoridades municipales aún no han informado de la participación en las marchas.
Esta plaza fue el destino de las doce marchas que partieron desde
distintos puntos de Bogotá y que hacia las 14.30h, pese al aguacero,
estaba abarrotada.
Además de los estudiantes locales, la capital colombiana recibió
delegaciones de varias ciudades, entre ellas Medellín (noroeste), Cali
(suroeste) y Villavicencio (centro), que viajaron en caravanas de
autobuses y motocicletas e, incluso, a pie.
“Las marchas han sido enormes y han transcurrido sin alteraciones”,
dijo el portavoz de la OCE, organizadora de la jornada de protesta junto
a la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU).
Esta movilización es la tercera de carácter nacional convocada por la
OCE y la FEU en rechazo a un proyecto gubernamental de reforma de la
educación superior que el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos
presentó al Legislativo el pasado 3 de octubre.
Ante el impacto de estas protestas, el presidente Santos anunció el
miércoles su intención de retirar dicha reforma a cambio de que los
universitarios regresen a las aulas.
Las actividades en las 32 universidades públicas de Colombia están
suspendidas desde el 12 de octubre para exigir que se elabore otra
iniciativa consensuada con la comunidad universitaria.
Santos reiteró en Bogotá su oferta de que retirará el proyecto ante
el llamamiento que le han hecho los padres de familia para evitar la
pérdida del semestre lectivo, pero a cambio de que se levante la huelga.
“No les vamos a poner ‘conejo’ (engañar o quedar mal)”, expresó el
gobernante tras reafirmar que “vamos a retirar la reforma si levantan el
paro y vuelven a clases”.
EFE