(PL) Cuba denunció hoy la negativa del Gobierno norteamericano a
entregar las imágenes satelitales del 24 de febrero de 1996, elemento
clave en el caso del antiterrorista de la isla Gerardo Hernández.Cuba: Revelaciones sobre Fiscal estadounidense
Gerardo Hernández, René González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González cumplen condenas que llegan hasta doble cadena perpetua más 15 años de cárcel por informar sobre planes terroristas de grupos anticubanos asentados en Estados Unidos.
Un artículo del diario Granma se pregunta, además, por qué los medios de comunicación norteamericanos hacen silencio ante un hecho tan escandaloso.
Apunta que Gerardo Hernández, condenado a dos cadenas perpetuas más 15 años de prisión, presentó su solicitud de Habeas corpus sobre la base de nuevas evidencias.
El caso es altamente significativo del empeño de los distintos Gobiernos norteamericanos en demostrar que no están dispuestos a revisar lo ya juzgado, por más que surjan múltiples evidencias de que se ha apelado a métodos ilegales para condenar a los detenidos, asegura.
Richard Klugh, miembro del equipo de defensa de los Cinco, como se les conoce internacionalmente, ha denunciado que el Gobierno norteamericano todavía se resiste a presentar la evidencia documental que se le reclama.
El texto refiere que en esa evidencia puede conocerse claramente lo que pasó con las avionetas derribadas el 24 de febrero de 1996, e impide una vía hacia una defensa correcta de Gerardo.
También en una reciente conferencia, Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional, explicó que el gobierno estadounidense ha mantenido invisibles las imágenes de satélite que celosamente guarda sobre ese incidente.
No permitió que las vieran hace 15 años los investigadores de la Organización de Aviación Civil Internacional, se negó a presentarlas al Tribunal de Miami y ahora reitera su negativa ante la demanda de la defensa de Gerardo, resaltó.
Tan obvia y sospechosa es su actitud de impedir que otros vean las pruebas que solo conoce Washington que, en su dilatado alegato de 123 páginas y tres anexos contra Gerardo, apenas aluden al asunto en un torcido párrafo de cinco líneas, destaca el rotativo.
Alarcón, que fue el representante de Cuba ante aquella reunión de la OACI en 1996, recordó que ningún tribunal de Estados Unidos tenía jurisdicción sobre el incidente del 24 de febrero de aquel año, salvo que hubiese ocurrido en el espacio internacional.
La investigación realizada por la OACI reveló algo sorprendente. Pese a estar advertidas de antemano por su Gobierno, las estaciones de radar norteamericanas, o no registraron el suceso u ofrecieron datos contradictorios o destruyeron esos datos.
La única "prueba" suministrada por las autoridades estadounidenses es el testimonio del capitán de un navío que opera, ¿casualmente?, desde Miami y, según nuevos datos, los dueños estuvieron vinculados como contribuyentes financieros a la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), subraya el texto.
De ahí el interés, primero de la OACI y luego de la defensa de Gerardo por las imágenes satelitales, insiste, el Gobierno norteamericano nunca negó la existencia de las mismas, admitió tenerlas, pero lleva quince años prohibiendo que alguien más pueda verlas.
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