Una familia estadounidense acudió a la justicia para recuperar cerca de 300.000 dólares que una anciana legó al grupo religioso encabezado por el cuestionado predicador del fin del mundo, Harold Camping.
La emisora de radio evangelista que le pertenece se apoderó de la fortuna de Doris Schmitt, después de que muriera en mayo de 2010.
Dos sobrinas de la difunta, que no tenía hijos, recibieron, de acuerdo con el testimonio de Schmitt, 25.000 dólares cada una.
Dos sobrinas de la difunta, que no tenía hijos, recibieron, de acuerdo con el testimonio de Schmitt, 25.000 dólares cada una.
El resto de su patrimonio pasó a ‘Radio Family’, a través de la cual el numerólogo evangelista divulgaba sus controvertidas profecías, como la de la llegada del Juicio Final para este pasado 21 de mayo.
Aunque dos días después de que fallara el vaticinio, Camping abandonó su emisora de radio, que habría podido gastar tanto ésta, como muchas otras donaciones, en la publicidad callejera que anunciaba la pronta llegada del Apocalipsis.
Aunque dos días después de que fallara el vaticinio, Camping abandonó su emisora de radio, que habría podido gastar tanto ésta, como muchas otras donaciones, en la publicidad callejera que anunciaba la pronta llegada del Apocalipsis.
La emisora se financiaba generalmente con donaciones y fortunas legadas y según los datos de ‘CNNMoney.com’ habría recibido cerca de 80 millones de dólares en contribuciones entre 2005 y 2009.
Aún a sabiendas de que la mujer a sus 78 años dejaba su dinero y sus bienes a favor del colectivo religioso de Camping, sus familiares trataron de convencerla para que no lo hiciera.
Aún a sabiendas de que la mujer a sus 78 años dejaba su dinero y sus bienes a favor del colectivo religioso de Camping, sus familiares trataron de convencerla para que no lo hiciera.
Sin embargo, la admiración a Camping y el amor a ‘Radio Family’ estuvieron por encima de esos argumentos.
Un miembro de la familia, Eileen Heuwetter, admitió lo mucho que su tía amaba la emisora evangelista y cuánto admiraba a su director, considerándole como un verdadero profeta.
Un miembro de la familia, Eileen Heuwetter, admitió lo mucho que su tía amaba la emisora evangelista y cuánto admiraba a su director, considerándole como un verdadero profeta.
“Ella literalmente tenía a Family Radio día y noche —explicó—, se iba a la cama con la radio y se despertaba con ella.
Era todo lo que tenía”.
Sin embargo ella y otros parientes están decididos a declarar ante el juzgado que la anciana no le hubiera dejado sus bienes a Camping de haber visto que su vaticinio escatológico era tan erróneo.
