El presidente chileno, Sebastián Piñera, se mostró ayer abierto a incluir en un proyecto de indulto a militares de más de 80 años y enfermos terminales, “entre los que se pueden encontrar violadores de los derechos humanos”, lo que marca un giro respecto a su postura inicial de negarse a entregar estos beneficios, que había sido hecha pública recientemente, reporta AFP.
Piñera, de visita oficial en España, aseguró que en el marco de un proyecto de ley de indulto que pretende descongestionar las cárceles chilenas -con una sobrepoblación del 70%- “no se puede hacer ninguna distinción por el hecho de ser civil o militar”.
Piñera, de visita oficial en España, aseguró que en el marco de un proyecto de ley de indulto que pretende descongestionar las cárceles chilenas -con una sobrepoblación del 70%- “no se puede hacer ninguna distinción por el hecho de ser civil o militar”.
El proyecto anunciado oficialmente el martes por el ministro de Justicia Felipe Bulnes contempla la sustitución de penas menores por trabajos comunitarios y un indulto que afectará a reos con reclusión nocturna y mujeres con la mayor parte de la pena cumplida y conducta ejemplar.
Sin embargo, Piñera sorprendió ayer al señalar que “vamos a conversar y explorar en el Congreso la posibilidad de otorgar conmutaciones de penas o indultos a personas de edad avanzada, mayores de 80 años y a personas que estén con enfermedades terminales, de forma tal que puedan pasar sus últimos años o meses no en una cárcel, sino en sus propios domicilios”.