La constructora brasileña Odebrecht presuntamente inyectó en 2010 cerca de un millón de dólares en las campañas políticas de dos candidatos a gobernatura del Partido Revolucionario Institucional (PRI): Javier Duarte y Rodolfo Torre Cantú. Tras el triunfo de ambos candidatos, la constructora obtuvo diversos contratos en Veracruz y Tamaulipas como resultado de su aportación en campaña.
Así lo especifica una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR), que retomó declaraciones de exdirectivos de Odebrecht, y las incluyó en los documentos que mandó a un juez federal para solicitar la orden de aprehensión en contra del exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin.
El sitio de noticias Animal Político informó que el Ministerio Público decidió incluir estos señalamientos para fortalecer su caso contra Lozoya, ya que presuntamente, fue el exfuncionario quien propuso a Odebrecht dicha inyección de dinero.
Según lo informado por el medio, la constructora brasileña cobró interés en México en 2009 como resultado de un encuentro casi fortuito que se dio entre el entonces Director Superintendente en el país de la compañía, Luis Alberto de Menesses Weyll, y Emilio Lozoya, quien en ese momento era director del Foro Económico Mundial de América Latina.
El interés por desarrollar la empresa en México resultó en una recomendación de Lozoya a Weyll para que se “asociara con empresarios de nivel estatal para fortalecer su presencia en el país, y específicamente le habría recomendado dirigirse a Veracruz y Tamaulipas, entidades que para 2010 estaban bajo administración priista y con la posibilidad de repetir sexenio”, según informó Animal Político.
La investigación apunta a que fue Lozoya quien personalmente presentó a los directivos de Odebrecht con diversas figuras políticas en el país. Y a manera de devolver el favor, la empresa transfirió en 2012 más de USD 3,000,000 a Lozoya. El pago se hizo en cinco partes a través de cuentas fachada.
Según el informe de la FGR al que el medio nacional tuvo acceso, las recomendaciones de Lozoya fueron alianzas con empresarios y políticos por igual.
“Cabe resaltar que en julio de 2010 habría elecciones estatales y que el entonces gobernador Fidel Herrera se encargaría de designar como su sucesor a Javier Duarte de Ochoa.
Por ello la compañía Odebrecht, con la finalidad de obtener un buen posicionamiento en el futuro gobierno, aportó a la campaña de Javier Duarte de Ochoa la cantidad de 500 mil dólares americanos”, indica el documento.
Algo semejante ocurrió en Hidalgo, donde por recomendación de Emilio Lozoya, Odebrecht hizo alianza con la empresa Construcciones Industriales Tapia, la cual tiene gran presencia política en el estado.
De acuerdo con los fiscales, estas alianzas le ayudaron a Odebrecht a fortalecer su posición en la búsqueda de contratos a nivel federal, como los de Pemex en torno a la refinería de Tula, en Hidalgo.
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