Los argumentos esgrimidos por Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú para suspender su participación en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) forma parte de una estrategia para borrar las huellas progresistas que dejaron en la región líderes como Hugo Chávez, Néstor Kirchner y Luiz Inácio Lula Da Silva.
A esta conclusión llegaron los diputados del Parlasur Julia Perié (Argentina) y Ricardo Canese (Paraguay) consultados por Sputnik en el marco de una nueva sesión del Parlamento del Mercosur (Parlasur) este viernes 27 en Montevideo.
En este sentido, los diputados del Parlasur señalaron que la retirada de seis países de la organización es parte de la cadena de acontecimientos que viene sucediendo desde hace casi diez años: el golpe militar de 2009 que derrocó al presidente Manuel Zelaya en Honduras, la destitución del presidente Fernando Lugo en Paraguay en 2012 y la de Dilma Rousseff en Brasil en 2016, la prisión de Lula y la expulsión de Venezuela del Mercosur.
La diputada argentina del Frente para la Victoria Julia Perié opinó sobre la situación de la Unasur: "Que no participen estos países en este bloque regional, que fue concebido para precisamente ir consolidando esa integración que tan bien la trabajamos y militamos en el Parlasur, nos golpeó bastante. Yo creo que tiene que ver con estos gobiernos neoliberales que están hoy en el poder".
En cada uno de los países "vivimos un momento muy tenso porque nos están persiguiendo. Estos gobiernos tienen a las fuerzas de seguridad puestas en contra del pueblo y eso es muy peligroso", agregó.
Por su parte, el paraguayo Ricardo Canese apuntó contra Estados Unidos,"el director de orquesta" detrás de todos esos movimientos.
Sobre el carácter de estas nuevas medidas antipopulares, Canese destacó que a los nuevos Gobiernos "les resulta más barato recurrir al Poder Judicial, a los medios concentrados, al dinero, en fin, a una serie de factores que les resultan menos costosos desde el punto de vista de la opinión pública. Además, no hay tanques en las calles y así, minimizan los muertos".
Además sostuvo que la prisión de Lula representa "un grave atentado a la democracia". "A Lula lo pretenden proscribir al igual que a todo líder progresista que va a ganar limpiamente porque no tienen condiciones de ganar libremente".
El 23 de mayo de 2008 se firmó en Brasilia el Tratado Constitutivo de la Unión de Naciones Suramericanas, pero diez años después el cambio de signo político de los Gobiernos de la región llevaron el sueño integrador a la crisis. Ya no están ni Chávez ni Kirchner, Lula está en la cárcel, y Rafael Correa es ahora un opositor en Ecuador. Desde enero de 2017, cuando venció el mandato de su secretario general, Ernesto Samper, la Unasur quedó sin conducción.
En este sentido, el político pronosticó cuál será el próximo paso: "Tratan de reducir el Mercosur y el Parlasur a su mínima expresión". La ofensiva contra la Unasur podría extenderse a la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe), para dejar en pie solo a la OEA.
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