Durante su visita esta semana a Suecia, el überprogresista papa Frank recalcó que las mujeres nunca podrán ser sacerdotisas en la Iglesia Católica:
Francisco expresó sus pensamientos sobre el tema en respuesta a una pregunta el martes de un periodista a bordo del vuelo papal de vuelta a Roma después de una visita de dos días a Suecia.
El periodista, un sueco, mencionó que entre los que recibieron a Francisco durante su visita estaba la arzobispa luterana Antje Jackelen de Uppsala.
Jackelen es la primado de la Iglesia de Suecia y una mujer.
"¿Es realista pensar que podría haber mujeres sacerdotes también en la iglesia católica en las próximas décadas?" -preguntó el periodista al Papa.
"Sobre la ordenación de las mujeres en la iglesia católica, la última palabra es clara", respondió Francisco, antes de mencionar la carta apostólica de Juan Pablo de 1994 que prohibía la práctica, Ordinatio Sacerdotalis. "Fue dada por San Juan Pablo II y esto queda".
-Pero ¿para siempre? -preguntó el periodista. "¿Nunca?"
"Si leemos atentamente la declaración hecha por San Juan Pablo II, va en esa dirección", respondió Francisco.
Son su Iglesia y su país, así que pueden discriminar a quien quieran según los rasgos biológicos que les den la gana, pero eso hace que uno se siga preguntando: ¿por qué hay mujeres —y hombres preocupados por la igualdad— que siguen afiliados a esta mafia?
(vía Friendly Atheist | imagen: DonkeyHotey)
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Publicado en De Avanzada por David Osorio
