El estadounidense Kim Dong Chul, de 62 años, ha sido condenado a 10 años de prisión por la Corte Suprema de Corea del Norte por un delito relacionado con el espionaje, informa TASS.
Fue arrestado el año pasado en la zona económica especial norcoreana de Rason, donde se encontraba bajo el pretexto de participar en actividades benéficas.
Dong Chul confesó que cumplía órdenes de la inteligencia surcoreana y recogía informaciones referentes al sector militar norcoreano y a la demografía en el país.
Admitió también "haber cometido crímenes monstruosos contra Corea del Norte" y difundido propaganda contra Pionyang.
El estadounidense se disculpó y pidió clemencia.
Aunque el fiscal pedía penas más severas, la Corte tomó en cuenta que decidió colaborar con la investigación y le condenó a 10 años.
A la edad de 19 años Dong-chul abandonó su ciudad natal, Seúl, para establecerse en EE.UU., concretamente en el estado de Virginia.
