INTRODUCCIÓN
Este texto es la obra de varios amigos, amigas y colegas que están interesados en mejorar el planeta para nuestros hijos y dar la posibilidad de buenas condiciones de vida, mejor que las que a nosotros nos ha tocado vivir.
El mundo de hoy, es nosotros, la tecnología, el dinero, el “YO” y el consumismo, los convierte en “el individuo por encima del colectivo” refirió el Presidente de Ecuador Rafael Correa el 13 de agosto del 2015 enfrentando otro tanteo de derrocarlo, como el ocurrido el 30 de septiembre del 2010.
El mundo de hoy es el desbaratar el planeta en aras de combatir “el mal”, “el terrorismo”…y su propia obra el crimen organizado, antes cubierto con el “decente” nombre MOSAD, CIA o MI6 y KGB (entidades de espionaje y contrainteligencia).
Este planeta nos mata todos los días, como un castigo a nuestro mal comportamiento con la naturaleza. Algunos inundan en inviernos, nos saluda con huracanes, tornados, tsunami o tormentas tropicales, impone “el cambio climático conocido como Niño o Niña”.
Este libro, procura acercar un aspecto de nuestras vidas, forjadas desde “la industria cultural”, a través los Medios de Comunicación.
Muchas de las conductas, de nuestras ideas, de nuestra cultura, y prácticas sociales fue acompañada de esta vía de comunicación social masiva.
Comenzó con lo impreso cuando pintaron nuestros antepasados en las cuevas de Altamira, hoy el sur de Francia. Siguió la imprenta de Gutenberg, desde ahí volantes y boletines, después los diarios de entonces y páginas impresas.
No existía en el siglo antepasado la Radio y la abuela Matilde creció sin saber la importancia entonces de lo impreso y fue el Medio Radio que convivió entre la música, las noticias, y esencialmente las radio-novelas, cuya una de sus grandes falleció en el 2015, Sofía Montiel.
Mi madre Bertha Julia, creció entre el Periódico, la Radio y en menor escala la Televisión, pero ya era la etapa de “Natacha” el “Derecho de nacer” o “Angelitos negros” en audio, es decir radio o TV abierta en imágenes.
El cine llenaba salas con los considerados clásicos, la “Novicia Rebelde”, “Casa Blanca” o “Lo que el Viento se llevó”. El color venció además del sonido al cine mudo y un poco al gran Charles Chaplin o Harold Lloyd.
Eran épocas de “Los Cañones de Navarone”, “El Bueno, el Malo y el Feo”, y la era de los efectos con la cinta “Moisés” o “La Biblia”, superadas por “La Guerra de las Galaxias” o “Matrix” que hicieron olvidar a “King Kong”.
Antes escuchó “Los 3 Villalobos”. Sonrió con “Arandú”. Disfrutó a “Kalimán”, ya oía “Sacha el Gitano” y otras propuestas como “Historia de una Canción”.
Ahora estamos en combos de Medios. Telefonía móvil con aparatos “inteligentes o Smartphone”, que tienen cámaras fotográficas, de vídeos, aplicaciones para interactuar con mensajes, audio y vídeo, sintonizar la radio y la TV, con solo acceder a la INTERNET cualquier versión digital de periódicos tenemos.
Lo mismo sucede con una Tablet. Antes el teléfono convencional era un lujo, ahora el móvil es natural en manos de vendedores ambulantes o altos ejecutivos y la gente accede al servicio de TV-cable.
Recuerdo todavía el uso del “beeper” o busca-personas, que fueron antes que los grandes equipos incómodos de “Nokia o Erickson” y donde al inicio sólo servía para el que tenía otro similar o tenía buen dinero.
En ese entonces nadie creía en ellos, hasta que apareció el mercadeo de “Bellsouth” y su oferta de “tele-fácil por un año” y masificó el “cell” o móvil de hoy en Nicaragua.
Ahora es la era de la INTERNET, ya no están las máquinas de escribir, pululan los monitores y pantallas de plasma, ya no hay telegramas, hoy es el chat, correo electrónico o wasap… Nadie espera la llegada del vehículo acuático, aéreo o terrestre con los libros o productos del reciente consumismo, hoy es virtual todo y en segundos los tenemos.
En un primer momento tuve la idea de titular este libro “Las mentiras de catedral”. Era una idea de graficar el tamaño de las versiones manipuladas, inventadas y mentirosas de hechos o historias tejidas desde lo mediático.
Estas “noticias” ofrecidas como temas ciertos y buscando desde el punto de empresas periodísticas vender, nunca es “informar” o incidir con un criterio, es decir inducir.
No es un “error humano” equivocarse, en el fondo es un acto de acompañar la labor de sostener el statu quo del sistema de pocos, dominando a muchos.
Desde los Medios de Comunicación, usted puede forjar percepciones, inventar condiciones, manipular conciencias y guiar a personas a ser enemigos de sus propios con-generes, es el caso de los que profesan el Islam, que nos han llevado a tipificarles de “terroristas” o “enemigos y malos” y eso es percepción generada no la verdad.
Después, tomé la decisión de buscar el título con algo de los diez mandamientos, “No mentirás”, pero resulta que sí algunos políticos, Obispos y un sector de los Sacerdotes y Pastores evangélicos promueven la mentira, ¿por qué tenía que callarme el hecho ante el público, que también las fuentes de información y los Medios de Comunicación mienten?
Mentir o inventar es tomado por un sector religioso como un arte para manipular. Dejé de pensar el tema, por respeto a los creyentes y no alimentar las aptitudes politiqueras de un sector eclesial.
Hoy la decencia, el respeto, la ética, la responsabilidad con la humanidad y defensa de la dignidad e integridad del ser vivo, es asunto del pasado para muchos.
Hoy esos muchos ceden ante la avaricia, ambición por el dinero, el ejercicio del poder político, financiero, religioso y hasta social de un sector de Organismos No Gubernamentales (ONGs), que tergiversaron su idea original y con ello volvió todo pecaminoso.
Así llegue al final de este libro, con lo que debió ser primero-digo yo- el título y su portada, idea dada de mi hija Dulce, la colaboración de Miguel Ángel y vivencias de mi hermano (qepd) y hermanas, con las cuales crecí como niño y adolescente; y también del colega José Leonel Mendoza, que aportó en el montaje y revisión.
Además del Ing. Federico Lacayo (Pitín), su esposa Marianne Maymi y amigos como Amaru Ramírez, Edgardo García José Antonio Zepeda (ANDEN)y mi brother Ramiro Cortez.
8vo MANDA-MIENTO con el sub-título; “Sí mentirás”, es el título del presente esfuerzo, que es paradoja al Octavo Mandamiento, cristiano “No Mentirás”.
El mandamiento (8vo) lo justifica “el Dios Oro”, el mismo que Rubén Darío canta en su primer libro “Azul”, donde explica la razón de este “pecado” que lo absuelve el dinero, las finanzas y el cinismo; enmarcado en el centenario de la muerte del gran poeta y literato Darío en 1916.
De Venta en Radio 580
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Datos del escritor:
Carlos Alberto Salgado Gómez
Movil, 505- 88-64-12-03
Profesión: Periodista y Docente Conferencista
Ubicación: Managua, Nicaragua
Licenciado en Ciencias de la Comunicación, graduado en la UCA con posgrado en comercio Exterior. Miembro fundador del colegio de periodistas, ha sido presidente de la Asociación de Periodistas Parlamentarios y de la Unión de Periodistas de Nicaragua, fue vicepresidente de Periodistas Centroamericanos.
Docente en la URACCAN, ha participado en seminarios a través de Radiofunk DDR, INCAE y Sociedad Interamericana de Prensa.
Cuenta con una amplia experiencia como comentarista de Radio, Prensa Escrita y Televisión.
Actualmente dirige el programa “Noticias y Comentarios en Radio 580”, Managua, Nicaragua.
Reciente publicó el libro; “Libertad de ex-Presión”.
Es columnista de crítica mediática por 10 años en “Bolsa de Noticias” y actualmente Semanario “El Mercurio”.
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