Una de las casas propiedad del presidente mexicano Enrique Peña Nieto fue vendida por una empresa que se benefició de contratos públicos millonarios, según reveló 'The Wall Street Journal'.
La residencia de descanso, ubicada en el Club de Golf de Ixtapan de la Sal, fue comprada en 2005 unas semanas después de que asumiera el puesto de gobernador del estado de México, a una de las empresas de San Román Widerkehr.
Desde aquel entonces el empresario recibió contratos de obras públicas por 150 millones de dólares, incluidos seis sin licitaciones, informó el rotativo.
La Presidencia de México ha negado la existencia de conflicto de interés, señalando que el presidente no asigna contratos.
Agregó que la casa siempre ha sido incluida en las declaraciones patrimoniales de Peña Nieto.
Aun así, las familias Peña Nieto y San Román mantienen una relación personal desde hace décadas y según varios medios, un hijo del empresario es padrino de la primera comunión de la hija mayor del presidente, según la BBC.
Este es el último escándalo sobre propiedades de los Peña Nieto.
El año pasado se reveló que la primera dama, Angélica Rivera, poseía una mansión valorada en al menos 7 millones de dólares.
La propiedad pertenecía al Grupo Higa, una empresa que también se benefició de millonarios contratos con el Estado.
También salió a luz en la declaración patrimonial del presidente otra enorme mansión, adquirida por tan solo 13 dólares.
