El ejército de Salvación en Australia abusó y maltrató por años a los niños que 'protegía' en una de las granjas ubicadas en Sidney Australia.
Eran alimentados con comida para mascota, abusados sexualmente y recluídos en jaulas entre 1966 y 1977.
Los hechos fueron denunciados a la comisión gubernamental que se encarga de dar seguimiento a este tipo de casos, olvidados por los años.
Uno de los menores fue obligado a tragar los restos de su propio vomito.
Tres de los culpables siguen vivos, y uno fue imputado por cometer crímenes indecentes.
La iglesia también está acusada de encubrir este tipo de abusos, las audiencias darán inicio en abril y se espera que los culpables paguen por ello.
Para ello se ha pedido la presencia en la corte de testigos.
